De la belleza
Venía yo, el otro día, por el antiguo Paseo Boteros (hoy no sé como se llama) arriba, de la ciudad de Lleida, mientras en mi mente le daba vueltas al tema de la belleza: ¿qué es?, ¿cómo se manifiesta?, ¿de qué manera se desarrolla?, ¿dónde se puede encontrar realmente?, ¿es subjetiva u objetiva?, ¿se educa?, ¿se aprende?...
Todo este enmarañado mental que me traía venía motivado por una frase que ví en un muro.
Apenas me di cuenta y sin más me encontré en la Plaza Cervantes y, cuando levanté la cabeza, desde uno de los extremos de la plaza, observé esta imagen.
Avancé hacia el centro y, después de un corto trayecto, me detuve ante ésta otra provocación visual.
Todo este enmarañado mental que me traía venía motivado por una frase que ví en un muro.
Apenas me di cuenta y sin más me encontré en la Plaza Cervantes y, cuando levanté la cabeza, desde uno de los extremos de la plaza, observé esta imagen.
José G. Ramos, 2013. Lleida. |
Avancé hacia el centro y, después de un corto trayecto, me detuve ante ésta otra provocación visual.
José G. Ramos, 2013. Lleida. |